Pepe Moral. Foto: Álvaro Pastor Torres

Álvaro Pastor Torres.- Todo espectáculo taurino que camina por la senda de la monotonía tiene un momento clave en el que de repente gira la caprichosa rueda de la fortuna y, o remonta el vuelo el festejo o definitivamente de despeña. En Osuna, afortunadamente, ocurrió lo primero y fue justo cuando Pepe Moral se hincó de hinojos para recibir con una larga en tercio a su primer toro, tercero de la ventosa tarde. Desde ese instante todo se vino arriba, empezando por el diestro palaciego que salió a por todas. Hasta entonces El Cid y Luque habían pasado sin pena ni gloria ante un inválido que fue muy protestado en el primer tercio y un reservón miura que fue sacando a luz el peligro que traía dentro en rápidas coladas que se fueron sucediendo cada vez con más insistencia.

Moral, variado y bullidor con capote y franela, dejó gotas de ese nuevo concepto manierista que va desarrollando en los ruedos. Mató pronto y bien y se llevó el primer trofeo de la tarde.

El Cid brindó el cuarto a un chaval ursaonés con el que se alió la peor de las suertes, y al que una fatal descarga eléctrica, casi mortal, lo dejó sin brazos y sin una pierna. Faena populista en los terrenos de la solanera donde destacaron tres naturales a cámara lenta de los que daba el saltereño en su época de esplendor. Luque fue haciendo a su segundo y le arrancó varias tandas de mucho mérito y ajuste con la derecha. Pepe Moral no pudo rematar por todo lo alto su actuación al topar con el serio sexto de Miura que además de no humillar nunca solo tenía medias arrancadas, a pesar de ello Pepe estuvo muy digno, mató rápido y volvió a tocar pelo.

Para los amantes de las estadísticas, y en especial Carlos Crivell a nivel general y Jesús Sánchez en el local, el primer toro de Miura que se lidió en el centenario coso de El Ejido respondía al nombre de Aceituno y estaba marcado con el número 74 del guarismo 4. El resto se llamaron Llorón, Abutarda, Amargoso, Limosnero y Barquerito.

Plaza de toros de Osuna (Sevilla). Sábado 12 de mayo de 2018. Corrida de toros. 2º espectáculo de la feria. Tres cuartos de entrada en tarde primaveral con fuertes rachas de poniente que aquí llaman «viento bajo». Buenos puyazos de Juan Antonio Carbonell y Manuel Jesús Ruiz. Juan Contreras saludó en banderillas. Al final del festejo salieron en hombros El Cid y Pepe Moral.

Seis toros de Miura, bien presentados, con variadas hechuras y plaza, destacando en trapío los lidiados en 4º y 6º lugar. 1º flojo, 2º un punto mirón y con peligro cada vez menos sordo, 3º algo desordenado, 4º se apagó pronto, 5º noblote y 6º parado que no humilló.

Manuel Jesús «El Cid», de verde botella y oro: pinchazo, casi entera atravesada y descabello (silencio). Casi entera atravesada que escupe y descabello (dos orejas)
Daniel Luque, de verde y oro: pinchazo, estocada y tres descabellos (silencio tras aviso). Pinchazo hondo (oreja tras aviso)
Pepe Moral, de tabaco y oro: pinchazo y estocada (oreja). Estocada (oreja)

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