La empresa Pagés, con Eduardo Canorea y Ramón Valencia al frente, es la responsable de la organización de los carteles de la Feria de Abril. Cuando está a punto de comenzar un nuevo ciclo, Eduardo Canorea hace una reflexión sobre su punto de vista de las combinaciones y sobre los aspectos más polémicos de las mismas.

Pregunta.- En la presentación de los mismos, explicó que “Morante no torea en Sevilla porque no ha querido hacerlo”. Al cabo del tiempo, ¿la opinión sigue siendo la misma?

Respuesta.- Me reafirmo en todo lo que comenté el día de la presentación de los carteles. La intención ha sido abrirle las puertas a los que deben ser protagonistas del futuro. El asunto de Morante está ya muy comentado No he acabado de entender que se le haya dado más importancia a que no esté un torero determinado, que al hecho de que haya otros toreros anunciados que han sido olvidados. No me parece justo que el debate se haya centrado en un ausente.

P.- ¿Sigue pensando que Morante no ha tenido interés en torear en Sevilla?
R.- Así me lo parece. Ha creado situaciones lejanas a la realidad y las ha presentado como inamovibles. Si se pone un límite económico y no se está dispuesto a negociar, lo que me parece es una falta absoluta de intención de estar en los carteles.

P.- ¿Y estos carteles están pensados como empresarios o como aficionados?
R.- Hay que posicionarse como aficionados. Los carteles deben provocar ilusión en el los espectadores, porque si no es así es un fracaso.

P.- ¿Qué virtudes tienen estos carteles de 2004?
R.- Lo mejor es que están todos los toreros que debían estar. Además, están colocados de forma que se debe provocar la competencia entre ellos. Toreros como Tejela, César Jiménez o Manzanares tenían que anunciarse, pero otros como Juan Diego, Serafín Marín, que son muy nuevos, también es justo que toreen.

P.- ¿Por qué se dice que los carteles de Sevilla se parecen más que nunca de a los de Madrid?
R.- Hay algo que es indudable: la mayoría de los toreros actuales son de Madrid. Pero pasan más cosas. Se están yendo de Sevilla muchas cosas del toreo, las ganaderías, las empresas, todo el negocio que genera el toro se está marchando de Andalucía. Sevilla está perdiendo peso específico en la Fiesta.

P.- Me refería a otra cosa. Los carteles no están muy rematados, como los hace ahora Madrid.
R.- No estoy de acuerdo. Puedo mencionar varios carteles de esta Feria que están rematados. ¿Dávila, Tejela y Manzanares es un cartel rematado? ¿Y Conde, Jiménez y Manzanares? Y le puedo decir muchos más. Ojalá en San Isidro, de donde soy abonado, haya carteles parecidos.

P.- ¿Cómo ha cuidado la empresa el tema del ganado, que es el punto fundamental para que una Feria sea buena?
R.- Se hace un seguimiento exhaustivo del ganado elegido y se ha hecho una selección para buscar lo mejor. Exigiremos un escrupuloso respeto a la presentación de las corridas. La lista de ganaderías es pública. Pensamos que está lo mejor de la cabaña brava, con el añadido de una semana de preferia con cuatro divisas del agrado de los aficionados al toro serio, como Cebada, Guardiola, Cuadri y Victorino. El lote completo de ganaderías de esta Feria no se encuentra en ninguna plaza del mundo, incluyendo Madrid, que ya quisiera tener este cartel ganadero.

P.- ¿Por qué hay tan pocos toreros sevillanos en el escalafón?
R.- Las dos únicas figuras que hay son Ponce y El Juli. Me preocupa la falta de toreros sevillanos, figuras o no, pero repito que es un problema extensivo a otras áreas del toreo. Se debe hacer una reflexión sobre este asunto.

P.- ¿Cómo ha ido el abono este año?
R.- El abono está mantenido en Sevilla. Se ha repetido el número del año pasado, lo que en un momento económico difícil y con la televisión alejada de la Fiesta, no deja de ser un triunfo. Este tema de la televisión es muy preocupante. La falta de información y los horarios son para alejar a la gente de las plazas. Todo esto repercute, aunque en Sevilla nos defendemos algo mejor que en otras partes.

P.- ¿Se ha arrepentido de no haber contratado a Morante?
R.- En absoluto. Pongo un ejemplo. Me gustaría tener un coche determinado, pero si me multiplican por tres el precio no puedo comprarlo. La pena es que el coche no es para mí, sino que era para compartirlo con muchos buenos aficionados. He insistido mucho ante el apoderado de Morante en la necesidad de satisfacer a los aficionados de Sevilla, lo mismo que le he recordado en la obligación de sentar unas bases para el futuro. La contestación es que el torero estaba muy enfadado. No tiene ninguna lógica.

P.- ¿Cuáles son los objetivos mínimos que se deben cumplir para que la empresa se sienta satisfecha al final de la Feria?
R.- Quiero que salga el sol todos los días, que no haya cornadas, que los toros se muevan pata que se corten orejas, pero sobre todo quiero que la gente se sienta compensada por su esfuerzo económico. Si se ven dos o tres faenas por tarde, creo al final estaremos todos contentos.

Carlos Crivell