La plaza de toros de Olivenza registró una gran entrada, casi lleno, para presenciar la novillada matinal en la que cuatro jóvenes diestros se citaron en busca del triunfo. Se trataba del cordobés Manuel Román; el salmantino Marco Pérez; el sevillano Javier Zulueta, y el portugués Tomás Bastos. Se lidió una novillada de Talavante, de juego muy desigual.
Debutó con picadores el joven sevillano Javier Zulueta, que demostró sus aires sevillanos en las muñecas que da Sevilla y que ofreció una lección de temple y lentitud. En el primero de su lote, fueron buenos los derechazos, ligados, presentando siempre por delante la panza de la muleta, que administró en los medios. Dibujó los naturales con trazo lento y que resultaron superiores, de ahí que conectasen de inmediato con los tendidos. Cerró con ayudados a media altura. Mató en segunda instancia y eso dejó el premio en una oreja.
Lanceó con gusto Zulueta al séptimo, que estaba muy medido de fuerzas. Lo mimó mucho en el inicio por ayudados y lo acarició en los derechazos que remató con pases de pecho, pero sobre todo con trincherillas que sacaban humo de las palmas. Luego llegaron los naturales, largos, cadenciosos, muy a ralentí, barriendo el albero con los flecos, que arrancaron roncos olés. Faena de toque de atención y que pone sobre la mesa del toreo a Javier Zulueta con todas las de la ley. Lástima el fallo con la espada porque mereció pasear dos orejas en lugar de la única que cayó en su esportón.
Manuel Román tropezó con los novillos menos potables. Marco Pérez demostró inteligencia y buena técnica. Tomás Bastos fue todo entrega sin espada.
Plaza de toros de Olivenza (Badajoz). Domingo, 3 de marzo de 2024. Tercer festejo de la Feria del Toro. Matinal. Novillos de Talavante, bien presentados aunque de juego desigual. Manuel Román, ovación y silencio; Marco Pérez, oreja y oreja; Javier Zulueta, que debutaba con caballos, oreja y oreja; y Tomás Bastos, que debutaba con caballos, ovación y oreja. Entrada: Rozando el lleno.