Dijimos en su momento que el de esta corrida era un cartel para aficionados. Y esa esperanza en una corrida con tres buenos toreros, distintos al sota, caballo y rey de todas las tardes, quedó frustrado. Y no solo fue porque la corrida de Lagunajanda, espléndida de hechuras, apenas soltara dos toros con cierta bondad, sino porque se echó en falta un paso delante de los toreros. Entre una corrida deslucida y unos toreros a mitad de camino, todo quedó en terreno de nadie. Ni chicha ni limoná.

El primero se revolvía sobre las manos. Se presumía que era cuestión de mando en la muleta. Galván se la dejó enganchar muchas veces y llegó a sufrir un feo desarme. Fue una faena sin contenido.

El cuarto fue uno de los dos buenos de la tarde. Se lució en el toreo de capote el diestro de San Fernando. La faena fue buena mientras el toro tuvo alguna vida. Cuando se movió, Galván estuvo bien en una faena centrada en la mano derecha con cierta insistencia, cuando la impresión es que el pitón bueno era el izquierdo. Hubo buenos muletazos, pero fue con unos circulares invertidos cuando calentó al tendido. Sinceramente, de David Galván siempre espero mucho más que unos recursos populistas.

Borja Jiménez se enfrentó a dos toros nada fáciles. Lo mejor de su tarde malagueña ha sido el toreo con el capote, ya en el recibo de sus toros, ya en los quites, como el del cuarto por delantales. El segundo fue un toro a la defensiva, tirando gañafones a la salida de los muletazos. Borja le bajó la mano y pudo conseguir algunos derechazos de calidad, pero todo duró un suspiro. El quinto fue una prenda, manso y huidizo, le puso las cosas muy difíciles al torero de Espartinas. Aún así, por la izquierda le dio algunos naturales de calidad. No hubo más. El toro huyó de todo y Borja lo persiguió por toda la plaza. Imagen desoladora. Se lo había brindado a Vicente Amigo, el guitarrista cordobés.

Ginés Marín le cortó una oreja al tercero por una buena estocada. Antes, su faena tuvo pasajes notables tanto en los derechazos como al natural. Con el toro muy aplomado, todo se hizo muy embarullado. No importó, porque el santo público malagueño le pidió la oreja, se supone porque lo mató a la primera. El sexto fue otro manso con mal estilo. A la defensiva, tirando derrotes, Ginés no logró nada positivo.

Se cortaron dos orejas de esas que uno olvida en cuanto sale de la plaza. Solo dos toros de Lagunajanda con cierta calidad. Pero me parece que a los toreros les faltó también dar un paso adelante. Puede que esté equivocado. La corrida fue decepcionante.

Plaza de toros de La Malagueta, 19 de agosto de 2024. Sexta de Feria. Más de media plaza. Seis toros de Lagunajanda, bien presentados y de juego diverso. Buenos, por nobles, tercero y cuarto. Muy deslucidos, quinto y sexto.

David Galván, de azul y oro. Estocada muy baja y descabello (saludos). En el cuarto, estocada trasera y caída y descabello (una oreja tras aviso).

Borja Jiménez, de verde hoja y oro. Estocada atravesada y descabello (vuelta al ruedo). En el quinto, dos pinchazos y un descabello (saludos tras aviso).

Ginés Marín, de azul y oro. Estocada (una oreja). En el sexto, media estocada (silencio).

Saludaron en banderillas Antonio Chacón, Manuel Larios y Fernando Pérez. Destacó Tito Sandoval a caballo.