Además de la ovación que escuchó Talavante en el tercero, la única muestra de fervor y entusiasmo del público se produjo antes del comienzo de la corrida, cuando la terna fue obligada a saludar desde el tercio. Fue un aplauso compartido, muestra de las ganas de ver grandes faenas por parte del respetable. Las palmas a Morante tras sus lances al primero y el saludo de Talavante al morir el tercero fueron el resumen de una corrida para el olvido.
BUENOS CABESTROS. De nuevo se lució la parada de cabestros de la plaza el llevarse al tercero. El nivel mostardo este año por los bueyes ha sido muy alto.
AURELIO CRUZ. El picador Aurelio Cruz, de la cuadrilla de Morante, fue aplaudido por su forma de citar al primero. Luego la tardanza del animal acabó por frustrar lo que podía haber sido un gran tercio de varas. Aurelio se mostró como un gran caballista.
CUADRILLAS. Además de Cruz, se lució el picador Tulio Salguero en el tercero. Poco más hubo en la tarde. Las cuadrillas cumplieron sin grandes alardes.
VOCES DEL TENDIDO. La voz más llamativa fue la comentada sobre la falta de quites, pero hubo otras, como la que exigía a los toreros que les pusieran las pilas a los toros. O aquel otro que al segundo muletazo de una faena ya pedía al torero que lo matara.