Luis Carlos Peris.- Sombreros fuera. Antonio, hijo del Niño de la Palma, a escena. Nacido en Ronda el 16 de febrero de 1932, se fue haciendo hombre en Sevilla y en Sevilla murió el 19 de diciembre de 1998. Considerado torero de toreros por unanimidad, Antonio Ordóñez Araújo mandó en el toreo en la década de los cincuenta y la rivalidad con su cuñado Luis Miguel Dominguín alcanzó fama universal gracias a los reportajes que de esa campaña hizo el Nobel Ernest Hemingway en la revista Life.
Antonio, aun sin renunciar jamás a Ronda, se sevillaniza de tal manera que muy joven viste la túnica de nazareno de la Soledad de San Lorenzo y es proclamado años después hermano mayor de la Esperanza de Triana. Pero circunscribiéndonos a su trayectoria en la Feria de Sevilla hay que destacar que entró en ella la última tarde de Pepe Luis y que se despidió alternando con Curro el viernes de Feria de 1969. Curiosamente, tanto su entrada como su salida la hizo con los dos toreros más queridos por Sevilla.
Esa primera tarde fue la del 20 de abril de 1952 y mató una corrida de Ignacio Vázquez en compañía de Pepe Luis y de Pablo Lozano. La primera oreja que cortó fue al día siguiente a un toro de Tassara alternando con Raúl Ochoa Rovira y José María Martorell. Tres días después vivió su primera apoteosis sevillana con un toro de Juan Antonio Álvarez desorejándolo en compañía de Manolo González y de Martorell.
En el 53 es gravemente cogido en el capote por su primero el 21 de abril y ahí acaba su feria. Mataba esa tarde una corrida de Guardiola con Joaquín Pareja Obregón, Martorell y Manolo Vázquez. El servicio militar le impide torear en la Feria del 54 y vuelve al año siguiente a pesar de haber sido herido en Castellón. Corta oreja en la de Cobaleda con César Girón y Pedrés, mata la de Miura con Rafael Ortega y César Girón y cierra con la de Tassara en compañía de César Girón, Paco Mendes y su hermano Pepe Ordóñez.
Se anuncia en cinco tardes en 1956 y corta oreja en las dos primeras. El 18 de abril con toros de Cobaleda junto a César Girón y el mexicano Joselito Huerta y el 19 con la de Núñez y Rafael Ortega y César de compañeros. Mata también la de Miura con corte de rabo de Rafael Ortega, la de Tassara y la del Marqués de Villamarta en presencia de Franco.
Desafortunada su Feria de 1957, saliendo abroncado las cuatro tardes que se anunció. Mató las corridas de Cobaleda, Miura, Núñez y Villamarta. Cuatro días seguidos de malos ratos en una Feria que se llevaría de calle Jaime Ostos cortando tres orejas en dos corridas.
Le da Antonio la vuelta a la tortilla en 1958. Abre el Domingo de Resurrección para darle la alternativa a Rafael Chicuelo en presencia de Manolo Vázquez con una sensacional faena a un toro de Núñez. Mata la corrida de Cobaleda y la de Montalvo sin que pase nada y cuaja un faenón el 20 de abril a un toro de Antonio Pérez alternando con Rafael Ortega y Jaime Ostos.
Segundo y último Domingo de Resurrección sevillano para Ordóñez en el 59. Esta vez doctora al valentísimo Juan García Mondeño con toros de Raimunda Moreno de Guerra con Manolo Vázquez de testigo y ve cómo triunfan sus dos compañeros de cartel. Se desquita desorejando toros de Benítez Cubero, Cobaleda y Núñez en compañía de Julio Aparicio dos tardes, Gregorio Sánchez, Manolo Vázquez, Mondeño y Curro Girón.
En 1960 corta una oreja a un toro de Benítez Cubero con Chicuelo y Mondeño el 27 de abril y no pasa nada al día siguiente con toros de Cobaleda y de Peralta junto a Manolo Vázquez y el portugués José Julio. Al año siguiente se anuncia dos tardes y no toca pelo. El 18 mata la de Tassara con Manolo Vázquez y Curro Romero, y al día siguiente con toros de Antonio Pérez alterna con Mondeño y Paco Camino.
Al año siguiente se anuncia en dos corridas, el 18 para matar la de Tassara con Manolo Vázquez y Curro Romero, y en la de Antonio Pérez junto a Mondeño y Paco Camino. Fue una feria excelsa de Curro y sin nada destacable en lo que concierne a Ordóñez, que está pensando en su retirada. Tras no venir en el 62 se corta la coleta en Lima en noviembre del 62 y no vuelve a Sevilla hasta cinco años después.
Y he ahí la gloria, pues quizá la de 1967 sea la Feria más brillante que se recuerda. Reapareció Antonio la tarde del 20, jueves de Feria, con una corrida de Benítez Cubero con el Litri y Curro. Toda la tarde lloviendo, pero todo se abrió con Chulito, el quinto de la tarde, un zambombo de 609 kilos al que Curro le hizo un quite antológico como presagio de la gran faena del rondeño. Brindada a Utrera Molina fue un compendio de arte, pureza y hondura que no coronó con la espada. Al final, los tres salieron a hombros por la puerta de cuadrillas.
Mejor aún estuvo el sábado en la de Urquijo con Diego Puerta y José Fuentes. Vestido de heliotropo y oro, Antonio formó un lío con Zapatillero y Baboso de Urquijo y no cortó más de dos orejas porque se empeñó en matar recibiendo al cuarto. Salió en volandas por la Puerta del Príncipe como cierre a una tarde histórica.
Dos ferias más toreó este sevillano de Ronda. En la del 68 se anuncia dos tardes, el miércoles mata la de Núñez con Mondeño y El Viti, que corta una oreja. El viernes corta una oreja Antonio y ve cómo Diego Puerta le corta el rabo a un colorao del Marqués de Domecq en presencia de Curro.
La última Feria de este prodigio de empaque, pureza y hondura es la de 1969. Mata el lunes con corte de oreja la corrida de Urquijo con El Viti y Ángel Teruel, el miércoles ve cómo Manolo Cortés sale por el Paseo de Colón con la corrida de Núñez y el viernes es su última tarde sevillana. Le corta la oreja a un toro de Bohórquez en compañía de Alfredo Leal y Curro Romero. Es el 18 de abril de 1969 y ya no se vestirá de luces más en Sevilla. Falleció en su casa de calle Iris el 19 de diciembre de 1998.
Nacido en Sevilla en el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, frente a la Maestranza. Aficionado a los toros desde su infancia gracias al ejemplo paterno, un viejo amante de la fiesta que vio torear a Guerrita. Abonado de la Real Maestranza desde pequeño. 