Foto: Álvaro Pastor Torres

Álvaro Pastor Torres.– Casi cinco horas de función taurina -algo así como ver seguidas Ben-Hur y Casablanca, pero sin palomitas en este caso- y una conclusión cierta: la Escuela Taurina de Camas tiene pasado, presente y futuro esperanzador. Formato inédito de festejo con tentadero -sin caballo- para los más pequeños de la casa, lección de un antiguo alumno y novillada con utreros y añojos (aunque todos salieron marcados con el guarismo 8) para los más rodados. Lleno de reventón en la coqueta placita, buena organización, Fernando «El Almendro» en estado puro y un encierro de El Parralejo con ejemplares de alta nota.

Jesús Álvarez, que reaparecía en público tras una larga y dura travesía del desierto, se fajó con un voluminoso novillo que derribó con estrépito al picador. Faena muy entonada y de interés creciente que en lo que a trofeos se refiere quedó algo reducida por la tardanza del animal en doblar tras un estoconazo cobrado a ley. Antes, con las vacas de tienta, encandiló por el buen manejo de las telas el jovencísimo Daniel Fernández, alumno de la Escuela que además entrena con Tomás Campuzano.

Todos los actuantes firmaron lidias muy dignas y casi todos tocaron pelo a pesar de los avisos. Alfonso Alonso anduvo muy solvente y con clase, si bien su actuación no caló lo suficiente en los tendidos. El tramo final del festejo dejó tres añojos de vuelta al ruedo, no del todo aprovechados, si bien José Martínez llegó con facilidad al público.

Plaza de toros de Camas. Domingo 22 de septiembre de 2019. Novillada sin picadores mixta en clase práctica organizada por la Escuela Municipal de Tauromaquia de la localidad. Lleno en mañana agradable. Antes del inicio se tentaron dos vacas de El Parralejo por los más jóvenes; destacó con capote y muleta Daniel Martín, largamente ovacionado. El novillero con picadores Jesús Álvarez partió plaza en una «clase magistral» ante un serio novillo. Miguel Uceda Vargas que tuvo que cortar la temporada debido a una lesión fue sustituido por Mario Sánchez. Buenas lidias, bregas y hasta un quite providencial de Fernando del Toro. Al finalizar el festejo salió en hombros José Martínez.

Un novillo (1º) de Hijos de Dolores Rufino, y cuatro erales y cuatro añojos de El Parralejo, de buen comportamiento en general, destacando 2º, 7º, 8º y 9º, estos tres últimos premiados con la vuelta al ruedo.
Jesús Álvarez: oreja tras aviso
Alfonso Alonso: oreja tras aviso
Álvaro Vicario: oreja
Diego Vázquez: silencio tras aviso
Mariano Fernández: oreja tras aviso
Mario Sánchez: palmas tras aviso
Alejandro Gordillo: oreja
Liberto Díaz: oreja
José Martínez: dos orejas

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