Luis Carlos Peris.– Timoratos y ciertamente pacatos en el temor de perder el voto de los animalistas, antitaurinos y demás fauna tan agresiva con la corrida, de todos los presidentes de Gobierno salidos de las urnas, sólo Rajoy se dejó ver en una plaza. Iba a una corrida en la feria pontevedresa de la Peregrina y hasta el año siguiente. Suárez, Calvo Sotelo, González, Aznar, Zapatero y Sánchez jamás fueron vistos en una plaza de toros. Es más, sólo Borbolla y Chaves asistieron a festejos y Griñán ni se dignaba presidir la entrega de los premios a toreros y universitarios que otorga la Maestranza. Entonces y viendo lo que vimos, cómo vamos a extrañarnos de que los que hoy nos manejan como a polichinelas estén arrinconando a la Fiesta. Arrinconándola y preparando el puntillazo con unas medidas encaminadas a que organizar un festejo sea una misión imposible. Políticos, qué tropa.

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