En la tarde de ayer arrancaba la décimo quinta edición de las Jornadas Taurinas de Villaseca de la Sagra que un año más organiza su Ayuntamiento con el objetivo de relanzar la afición taurina de la localidad y la provincia de Toledo y crear un foro de debate en torno a la Fiesta de los toros y su promoción.
Destacar en este inicio el cartel de “no hay billetes” con un lleno en el Salón Municipal que da pie una vez más a indicar que la Fiesta de los Toros está viva, que interesa al ciudadano de a pie y que sólo hace falta motivarle y ponerle en el camino a seguir.
Abría la presente edición una figura del toreo, el matador de toros sevillano Manuel Jesús “El Cid” y moderaba la charla coloquio Alfredo Casas, director de Aplausos Radio bajo el título “Vencer a los retos”.
El torero de Salteras habló de su trayectoria profesional, de su lucha continua para mantenerse en las ferias, incluso bromeaba con que “hay cierto sector del mundo del toro que parece que espera mi retirada desde hace tiempo”. Los toreros son artistas y tienen días mejores y peores, pero lo peor que le puede ocurrir a un artista es que cuando acabe su obra nadie la recuerde. Por suerte hay faenas que no se olvidan”.
El diestro andaluz, en sus casi quince años de alternativa, se ha enfrentado a todo tipo de ganaderías y se encuentra satisfecho de ello. Quizá el hierro de Miura sea del que menos toros ha estoqueado. “Sólo he matado dos toros de Miura, uno en Valencia y otro en Nîmes. El de Valencia no salió bueno, pero con el de Nîmes llegue a darle buenos muletazos y a disfrutar”.
Pese haber conseguido abrir las puertas grandes de todas las plazas de relevancia, Manuel Jesús se mantiene con los pies en la tierra y reconoce que el toreo es una profesión de esfuerzo y lucha continua. “Siempre importan las orejas, porque son necesarias, eso de que cuando estás arriba no importan no es cierto” aunque también reconoce que no siempre tienen el valor que se merecen. “Desgraciadamente el sistema está cambiando. No torea más el mejor torero ni triunfar en una plaza una tarde te da el pasaporte para volver al año siguiente. Ésto ha cambiado, los apoderados, las empresas, hay muchas cosas que se mueven bajo telón que los aficionados desconocen”.
El de Salteras formó parte del G-10, en un intento de luchar por la Fiesta, algo de lo que no se arrepiente. “No me arrepiento nunca de lo que hago, incluso perjudicando mi carrera. Todos lo hicimos mirando por la Fiesta, lo que pasó es que no todos ibamos al mismo son”.
En el plano artístico expresaba “ahora mismo es cuando mejor se torea de toda la historia, pero una cosa es torear bien y otra emocionar. La arruga es bella a veces. Hoy se le da mas importancia a las formas que el fondo, y en el toreo es importante el fondo, la pureza, la largura, cuando te abandonas y te olvidas del cuerpo, eso es lo que vale. Cuando te centras en la estética, la foto queda preciosa”.
En algo en lo que se ha mostrado muy firme “El Cid” es en la necesidad de defender y transmitir el significado de la Fiesta taurina. “Al toro hay que defenderlo siempre. Barcelona fue un punto de inflexión y de partida para muchos en esta lucha. Después ocurrió lo de San Sebastián, en Colombia Bogotá, sin darse cuenta de la repercusión económica que tiene. Por ejemplo, en América, hay muchísimas ciudades que viven del toro y que no son conscientes del daño que hacen quitando la Fiesta a restaurantes, hoteles, comercio, etc”.
Otro de los temas importantes que se trataron y que no podía pasar por alto en una localidad que apuesta tanto por el futuro, fue el de la juventud y los toros. “Al público hay que darle alicientes. Hay una o dos generaciones que se han perdido. Hay muchos jóvenes a los que les gusta los toros pero no saben y les parece una monotonía lo que hacen los toreros. Hay que educarlos desde pequeños, como por ejemplo en las clases prácticas para aficionados, que son importantísimas para explicar y que entiendan las sensaciones. Eso es instruirlos desde el principio y fomentar”, además de reivindicar precios asequibles para los más jóvenes.
Mirando de frente a la temporada que empieza, y teniendo en cuenta que en ella cumplirá tres lustros de su doctorado, el pasado 5 de febrero anunció su intención de enfrentarse a grandes retos, como encerrarse con seis toros de Victorino Martín en la plaza más importante del mundo, Las Ventas. “Creo que es algo que le debo a Madrid desde hace tiempo. Es mucha responsabilidad, es una plaza muy exigente y encima con una corrida de Victorino, pero siento que debo hacerlo” dejando muy claro que mata este tipo de corridas de toros ”porque me apetece. Quizá un toro muy bravo a veces resulte molesto y no te permita ese abandono en el toreo pero lo suples con la emoción”.
Otra de las plazas de gran peso para el de Salteras es la Real Maestranza de Sevilla, donde estará presente dos tardes y en la que volverá a vestirse de luces su compañero y paisano Juan Antonio Ruiz “Espartaco” el Domingo de Resurrección. “El otro día hable con él y dice que la responsabilidad de Sevilla, la fecha, con los achaques de la edad y la salud, es muy grande, pero José Antonio sabe lo que hace. No tiene nada que perder porque es su última corrida y es un gesto que le honra, el querer despedirse así de Sevilla. Creo que la gente lo va a acoger con un cariño tremendo y a poco que le deje será una bonita tarde”.
Al finalizar la mesa redonda Manuel Jesús “El Cid” y Alfredo Casas recibieron unos trofeos como reconocimiento a su profesionalidad de manos del alcalde de Villaseca de la Sagra, Jesús Hijosa.