El matador de toros de Espartinas Javier Jiménez firmó una tarde épica en la segunda corrida de los sanfermines de Pamplona. Se lidió una corrida de Cebada Gago, con poder y peligro, ante la que la terna compuesta por Eugenio de Mora, Pepe Moral y Javier Jiménez demostró capacidad para sortear los problemas de los toros. Eugenio de Mora, con dos toros muy difíciles, demostró oficio en dos faenas en las que fue prendido de forma aparatosa.
Bien toda la tarde Pepe Moral, que dio la vuelta tras matar al quinto por una labor seria y templada.
La nota emocionante del festejo fue la labor de Jiménez, que tras una faene inteligente al tercero, ya cuando estaba en los adornos finales, fue volteado de manera escalofriante. Recibió varias tarascadas del toro y cayó sobre el cuello. Esta inconsciente cuando lo llevaron a la enfermería, pero volvió para matar al toro, aunque perdió los trofeos al fallar con el estoque. El torero no estaba en condiciones de estoquear al animal.
Pasó a la enfermería y lidió al sexto, donde volvió a estar torero y templado.
En el examen posterior, se comprobó que Javier Jiménez tiene una triple fractura en las apofisis espinosas de las vértebras cervicales C5, C6 y C7.
Nacido en Sevilla en el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, frente a la Maestranza. Aficionado a los toros desde su infancia gracias al ejemplo paterno, un viejo amante de la fiesta que vio torear a Guerrita. Abonado de la Real Maestranza desde pequeño. 