La Real Maestranza de Caballería de Sevilla ha entregado su asignación anual para el funcionamiento de las Escuelas Taurinas de Andalucía. El Teniente de Hermano de la entidad, Javier Benjumea, entregó 6000 euros a Eduardo Ordoñez, presidente de la Asociación de Escuelas. Al acto asisitieron el consejero de Gobernación y Justicia, Francisco Menacho, y el director general de Espactáculos Públicos, Luis Partida.

El consejero de Gobernación y Justicia, Francisco Menacho, ha destacado la labor que realizan las 23 escuelas taurinas de la comunidad autónoma tanto en la formación de los futuros profesionales del toreo, como para mantener la afición, asegu-rando que, además de ser un instrumento para canalizar talen-tos, garantizan un futuro de “simbología, historia, belleza y mitología” y dan continuidad a la fiesta de los toros.

Menacho, acompañado del director general de Espectáculos Públicos y Juego, Luis Partida ha presidido el acto de entrega de una donación por parte del teniente hermano mayor de la Real Maestranza de Caballería, Javier Benjumea al presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas, Eduardo Ordóñez.

La donación de 6.000 euros contribuye a sufragar, entre otras actividades, las novilladas con público que organiza la entidad para los jóvenes que forma, que sin lugar a dudas cons-tituyen una forma de promoción y también sus primeros contac-tos con el calor del público que acude a los cosos, una afluencia que a juicio del consejero demuestra la vigencia de la fiesta en nuestra tierra.

El consejero se ha mostrado convencido de que la actividad de las 23 escuelas taurinas existentes en Andalucía y el hecho de que sigan surgiendo entidades demuestra el arraigo de la Fiesta en la sociedad andaluza y también la afición que despierta entre muchos jóvenes, felicitando a la Asociación por la gran labor que realiza.

Las escuelas taurinas, reguladas como entidades por la Junta en 2001 logran, según ha explicado, que los alumnos sigan cursando sus estudios obligatorios mientras desarrollan y ponen a prueba su talento y forjan su carácter asimilando valores como el compañerismo o la responsabilidad.