Los expertos de la Unión Europea flexibilizaron ayer las prohibiciones aplicadas a España en lo referente a la enfermedad de la Lengua Azul, pues permitirán movimientos de ganado ovino y bovino en áreas donde haga más de cuarenta días que el virus haya dejado de estar activo.
Aunque los expertos de los Estados miembros dictaminaron que continúen las restricciones a la exportación, acordaron posibilitar los movimientos de animales de esas explotaciones si se dirigen a otras zonas que también estén libres de la Lengua Azul, y sólo dentro del territorio nacional.
Según el dictamen del Comité de la Cadena Alimentaria de la Unión Europea, para que en una zona se permitan los movimientos deben demostrarse que el virus o los vectores transmisores de la Lengua Azul no están presentes. En el caso que una vez abierto el traslado se volviera a detectar un foco, la prohibición sería restablecida.
Las restricciones comunitarias afectan a los envíos de rumiantes vivos, semen y óvulos en varias provincias de Andalucía (Jaén, Cádiz, Málaga, Sevilla, Huelva y Córdoba), Extremadura (Cáceres y Badajoz) y Castilla La Mancha (Toledo y Ciudad Real).