El novillero sevillano Francisco Lama de Góngora fue el protagonista de la Tertulia Taurina El Porvenir. Durante más de tres horas compartió el torero una reunión en la que contó vivencias, ilusiones y sueños. Entre ellas, hubo un amplio anecdotario de sus actuaciones este año y de como ve el futuro de la fiesta.
Comentó que, además de querer ser figura del toreo, está estudiando el Grado en Derecho, con mucha entuasismo y dedicación, porque pata ser torero también hay que formarse y aprended valores que la vida taurina por sí sola no te enseña. Lama de Góngora demostró una gran madurez, y no es escondió de cualquier pregunta que fueron formuladas por los tertulianos. Su principal inquietud delante de la cara del toro es el miedo, y fue digno de admirar su debate filosófico sobre el término, en la que se sinceró y expresó que dicha palabra esta muy presente en su vida taurina.
Su torero de espejo se llama José Maria Manzanares, al que le dedicó grandes palabras, y mostró un especial cariño para Luis de Pauloba – su hombre de confianza – al que le enseñó desde sus comienzos.
Sobre su temporada 2013, resaltó que le hubiera gustado torear más, pero con la situación actual, y sin costarle dinero ya tiene mucha importancia; ha toreado en ferias y plazas importantes, llevándose un grato recuerdo de muchas ferias, como de la Sevilla, – la plaza que le «debe todo» – pero especialmente la de Nimes, donde ha apreciado el sentimiento de su afición. La espinita que tiene es con la tizona, y fue sincero al decir que hasta mediados de temporada no ha cogido la técnica adecuada y el esfuerzo físico oportuno, pero estima que ya ha solucionado ese problema.
Sobre su debú en Madrid, dijo que apetecería torear allí, donde existe una afición muy buena, y muy sólida, pero es consciente que no se encuentra "preparado para ir una plaza de esta responsabilidad", porque para ir a Las Ventas, a debutar, hay que decir cosas buenas, y no por el mero hecho de debutar. Apostilló cuando yo me vea para «salir por la puerta grande».
También tuvo palabras de agradecimento para sus actuales apoderados (Tornay / Ellauri), a los que admira, y comparte afición y sentimientos.
Sobre la temporada que viene no se apresuró, y dijo que su mente está puesta en las primeras ferias, pero es consciente que ya no será la "novedad", y que vendrán otros, para pelear por un puesto en esas primeras ferias. Se le preguntó sobre su alternativa para 2014, y tampoco se escondió, y dijo que todo dependerá del desarrollo de la temporada, y que no le importaría – si no fuera en la Maestranza – tomarla en la plaza de toros de Nimes, y si es posible con Morante y Manzanares como compañeros de cartel. Mal gusto no tiene el joven novillero.
Se le pregunto por su participación en el festival taurino del 12 de octubre en Sevilla, y la polémica suscitada porque abriese el cartel, y expresó que lo que más le importaba «era torear, el primero o el último, pero torear y junto a las figuras que lo hicieron», pero apostilló que al final se tomó «una decisión que era la más acertada». Y un secreto, el sobrero que toreó en el festival – de Garcigrande – se lo regaló el maestro Julián López "El Juli", y se lo dijo tras finalizar la lidia del 6º novillo. Un detalle que nunca olvidará.
Por último consciente del futuro, no tuvo reparos en hacer autocrítica, y señalar mejoras para la fiesta, y para ello esta trabajando para fomentar a los más pequeños, y su trabajo y empeño está en formar a una juventud taurina de Sevilla para que conozca la profesión taurina, respete y sea educada en valores de fomento y divulgación de la vida taurina, extremos que es importante para el futuro de la fiesta.