El doctor Mulet, jefe del equipo médico de la plaza de toros de Sevilla, ha aclarado, respeto a la herida de Julián López El Juli, que “todo estaba muy bien controlado en la Clínica del Sagrado Corazón. Se le habían hecho una Resonancia y no se demostraba ninguna colección patológica. Todos los análisis practicados eran normales y no indicaban ningún signo de infección”.
Según el doctor Mulet, “el tratamiento que se estaba instaurando debería haber frenado la fiebre, que en muchos casos se produce sin que haya obligatoriamente una colección infecciosa”.
Prosigue el facultativo que “el torero pidió el alta para marchar a Madrid. Se le dijo que debería continuar el tratamiento. No sabíamos que tenía la intención de ir a Zaragoza”.
El doctor Val Carreres me llamó para decirme que había encontrado una colección en una ecografía y que pensaba que lo mejor era operar para drenarla.
Finaliza el doctor Mulet aclarando que “no podemos dudar de que haya existido esa complicación, pero hemos utilizado técnicas muy avanzadas y no las apreciamos. Pensamos que la evolución era buena y el mismo tratamiento debería haber resuelto posibles focos mínimos. Y en última instancia, si hubiera permanecido en nuestro centro la idea era proceder a otras exploraciones es ene l caso de persistir la fiebre, pero el torero prefirió salir del centro firmado el alta voluntaria”.
Por último, Mulet nos dijo que “respetamos al torero y su entorno respecto a esta decisión, pero debemos aclarar que teníamos perfectamente controlado tanto la herida como sus posibles compliaciones”.
Nacido en Sevilla en el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, frente a la Maestranza. Aficionado a los toros desde su infancia gracias al ejemplo paterno, un viejo amante de la fiesta que vio torear a Guerrita. Abonado de la Real Maestranza desde pequeño. 