Sevilla: 10ª de abono – Todo a medio gas

Carlos Crivell.– Todo se quedó a medias en la corrida de este extraño lunes del alumbrado en Sevilla. Fue muy raro el cartel para la fecha. Este lunes tan sevillano está asociado a recuerdos imborrables. La respuesta del público fue terminante: media plaza.

La tarde misma se puso antipática. No llovió en contra de todas las previsiones, pero un viento frío dominó durante toda la tarde para molestar a los toreros y meterse en los huesos de los asistentes. No era un día muy taurino. El clima tampoco se puso de parte del cartel.

La corrida de Daniel Ruiz era una incógnita. Cuando su nombre apareció entre las de la nómina de la Feria, las apuestas se dirigían a que la lidiarían las figuras. Se taparon los más poderosos y era preciso conocer el trapío y el comportamiento del encierro de Daniel Ruiz. El ganadero de Albacete tenía una deuda pendiente con Sevilla. En las dos últimas ocasiones que vino a la Feria no pudo ni completar seis toros. y el juego no fue brillante. En esta ocasión, Daniel Ruiz ha podido cumplir sus objetivos: ha lidiado seis toros y alguno de ellos ha sido más que notable. No fue una corrida completa, pero tuvo muchas virtudes. Cumplieron con los montados, no se derrumbaron de forma aparatosa y exhibieron nobleza, como ese segundo, un buen toro de principio a fin, o el mismo cuarto, toro bravucón pero rajado al final. No remató la tarde el lote enviado, pero se ha quitado la espina que tenía con la plaza de toros sevillana. Seguro que el ganadero lamenta que no se cortaran orejas, pero ya esa es otra historia que no depende solo el juego de sus toros.

A medio gas se quedó Manuel Jesús El Cid, que está en un momento delicado de su carrera, porque cuando un matador ya tiene detrás una larga trayectoria, la intransigencia y las exigencias son mayores. El Cid no estuvo ni bien ni mal con el noble y apagado primero, pero lo ocurrido en el cuarto fue ya otra historia.

Ese cuarto, que llegó a doblar los cuartos traseros en los primeros tercios, se vino arriba en la muleta del saltereño, a la que embistió con alegría y repetición. Y El Cid anduvo más que correcto en los muchos muletazos recetados con la diestra, fueron buenos los de pecho, pero no se la puso por el pitón zurdo, para acabar con el toro rajado.

La gente no le perdona una a este torero. Después de matarlo mal, salió a saludar unas palmas y se dividieron las opiniones. En el toreo no hay memoria.

David Mora, querido y admirado por su peripecia vital tras el tremendo percance de hace dos años, mostró su estilo clásico en los lances de capa y en los quites que realizó en la tarde. El primero de su lote, de nombre Calabrés, desarrolló mucha nobleza en la muleta, tal vez con el único defecto de no humillar lo suficiente. David dibujó una faena bella, al principio menos intensa al llevar la mano alta, al final con más profundidad al bajar la mano. El toro respondió y su labor ganó emoción. Fue una faena sin premio por el fallo con  la espada. Todo quedó en una ovación.

El quinto ya fue otra cosa. Fue un tratado de sosería que no ayudó al madrileño.

Daniel Luque hizo un gran esfuerzo con técnica y valor ante el sexto, al que exprimió en una labor larga pero muy meritoria. El frío y el cansancio del tendido le quitaron premio. Antes, con el tercero, dejó muletazos de buen corte que no remontaron. Se lució con la capa y su tarde también se quedó a medio gas, aunque su lote fue el menos bueno. Al final, todos a la Feria con el cuerpo tiritando.

Plaza de toros de Sevilla. 10ª de abono. Media plaza. Seis toros de Daniel Ruiz, de desigual presencia, algunos como cuarto y sexto se tapaban por los pitones, de juego variado, Destacó el bravo y noble segundo. El 4º bravucón y rajado. Nobles en general, pero sosos y apagados al final

El Cid, de nazareno y oro. Pinchazo y dos descabellos (silencio). En el cuarto, estocada atravesada que asoma, pinchazo y estocada (saludos con ligera división).

David Mora, de rosa y oro, pinchazo, estocada trasera y descabello (saludos). En el quinto,dos pinchazos y estocada (silencio).

Daniel Luque, de sangre de toro y oro, estocada caída (saludos). En el sexto,dos pinchazos y estocada (saludos tras aviso).