Padilla recompuesto con vendajes (Foto: Álvaro Pastor Torres)
Lentitud. Las corridas en Sevilla son de una lentitud pasmosa. Ayer los alguacilillos esperaron tres minutos a que los toreros salieran para hacer el paseíllo. Hubo banderillas, faenas largas, en fin dos horas y cuarenta duró la corrida.
Padilla. Juan José Padilla sufrió una cogida en el primero y quedó con el cuerpo lastimado y el terno roto. Se puso primero unos vaqueros y en el cuarto salió con unas vendas muy antiestéticas. Su mozo de espadas le aplicó linimento en la espalda.
Cuadrillas. Destacaron los picadores por encima de los banderilleros. Se lucieron Tito Sandoval, José Manuel González y Jabato.
Prohíbido el cante. De nuevo se puso un espectador a cantar al final de una faena, la del cuarto de Padilla. Hay que evitar esas situaciones más propias de plazas de pueblo. Está prohibido el cante.
Los brindis. Emocionante brindis de Padilla a Livia Caro, la hija de Joaquín Caro Romero. Abellán brindó el quinto a José María Manzanares, que ocupaba un asiento en el tendido 1.
Los clarineros. Se acerca el final de la Feria y los clarineros, seguro que por cansancio, tienen algunos fallos, como el gallo que ayer dejaron en un cambio de tercio del sexto.
Nacido en Sevilla en el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, frente a la Maestranza. Aficionado a los toros desde su infancia gracias al ejemplo paterno, un viejo amante de la fiesta que vio torear a Guerrita. Abonado de la Real Maestranza desde pequeño. 