Manuel Grosso.- Volvió a llover sobre Sevilla y la Maestranza estaba sombría y triste. No parecía que estuviésemos en plena Feria de Abril. Quizás por eso y por el nefasto juego de los toros del Puerto y Ventana de San Lorenzo, nos dio la oportunidad de meditar sobre lo que de verdad ocurrió en el ruedo. La única buena noticia de la tarde vino de manos del Cid, al que vimos mas decidido que en días anteriores y consciente de que no podía quemar su ultimo cartucho en balde. Le toco, sin lugar a dudas, el mejor lote de la tarde, sobre todo su segundo toro, que embistió mucho y bien, pero el torero de Salteras, quizás por las ganas que traía, fue incapaz de controlar su embestida y de templarlo en condiciones. Estuvo, pero no al nivel que se le debía exigir. Manuel Jesús El Cid esta como la imagen del cartel de este año de Gordillo; desestructurado. Mato con una estocada baja y aunque un amplio sector del público le pidió la oreja, el presidente hizo bien en no dársela.

Lo importante es que ahora reflexione en conciencia. Si está convencido que hizo un faenon, mala cosa. El publico, a diferencia de días anteriores, estuvo siempre con él, lo que es de justicia, a la vista de su trayectoria, pero que no se equivoque, todos necesitamos que vuelva ese torero poderoso al que nunca nadie le ha regalado nada. Si ayer le sirvió lo realizado, en lo estrictamente personal, bienvenido sea, si solo le sirve para el auto engaño, mejor que no hubiera ocurrido nada. Las malas rachas terminan pasando, como las nubes negras que descargan agua y como dicen los taurinos solo quien tiene la moneda puede cambiarla, y el seguro que la tiene.

Enrique Ponce termino matando los dos sobreros, el segundo de La Plata imposible, pero para su desgracia llevamos vistas este año varias faenas buenas, a toros imposibles, sin ir más lejos ayer a Manzanares. Yo esperaba más de la capacidad lidiadora de Ponce. Es cierto que ya se adivina el final de una extraordinaria carrera que lo ha mantenido en la cima del toreo durante más de una década, a lo mejor seria bueno para él y para su familia el que su carrera pasase a otra fase menos comprometida. Ayer Ponce fue incapaz de hacerse con el cuarto bis. ¿Una mala tarde o el primer aviso de que los tiempos han cambiado? Tengo mis serias dudas al respecto, la temporada lo dirá. Como también lo hará sobre ese nuevo animo que exhibe Talavante y que desgraciadamente le ha servido de poco en esta feria. Habrá que darle tiempo al tiempo.
 

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