Primer festejo de rejones y algo más de media plaza. Mucho viento y frío que se apoderó de la tarde. La corrida duró justamente dos horas, es decir, lo que tiene que durar.

ANDY SE HACE ROGAR. El primer rejoneador, Andy Cartagena, tardó varios minutos en salir a la plaza en el primer toro. Se había dado la orden para que saliera el toro, pero el joven estaría probando cabalgaduras.

NOMBRES DE CABALLOS. Sólo Diego Ventura exhibió el nombre de sus caballos, fiel a una costumbre que impusiera en su momento Hermoso de Mendoza. Cartagena y Hernández no lo hicieron. En estos tiempos es bueno dar a conocer el nombre de los equinos, como una señal de cortesía para el respetable.

PISO MUY SUELTO. Si el sábado había una polvareda, ayer la plaza apareció con el albero muy suelto, de forma que se formaron montañas del mismo. Los rejoneadores se quejaron porque ello dificultaba la movilidad de los toros.

CABALLOS SUELTOS. Casi todos los rejoneadores soltaron el caballo cuando enterraron el rejón en el toro. Y los caballos no acertaron nunca con la puerta de cuadrillas. No pasa nada, pero algún día puede haber problemas si un toro no está herido de muerte.

ALARDES EN EXCESO. En lugar de rejonear, los caballeros de ahora se dedican más a los alardes, como subir el caballo al estribo o ponerlos de rodillas. Gusta mucho a la masa, pero eso no es rejoneo.