Cogida de El Payo y buenos novillos de La Quinta

La Quinta / El Payo, Alejandro Carmona y Miguel Tendero

Ganadería: seis novillos de La Quinta, el cuarto como sobrero, de presentación correcta y juego variado. La novillada recibió un fuerte castigo en varas. El segundo, primero de Tendero, excelente por bravo y noble, lo mismo que enorme sexto. Encastado, el quinto. En conjunto, buena novillada con el defecto de ser algo blanda.

El Payo: cogido en un quite por el primero.
Alejandro Carmona: pinchazo y honda perpendicular (saludos), media tendida, pinchazo y estocada (silencio) y dos pinchazos y estocada contraria (silencio).
Miguel Tendero: estocada (una oreja), dos pinchazos y estocada trasera (silencio) y estocada (una oreja).

Plaza de Almería, 24 de agosto de 2008. 1ª de la Feria de la Virge del Mar. Dos tercios de plaza. El Payo fue cogido por el primero en un quite. Fue operado de una cornada en la cara interna del muslo izquierdo con dos trayectorias, la segunda de 18 centímetros, sale por la cara extrna, diseca la vena femoral y dislacera el músculo sartorio. Pronóstico: Grave. Miguel Tendero salió a hombros

Carlos Crivell.- Almería

La empresa Chopera organiza una novillada con picadores para abrir la Feria de la Virgen del Mar. Es lo que deberían hacer muchas otras empresas. Además, la novillada en esta ocasión llevaba el hierro La Quinta. Doble placer: una novillada y del encaste de Santa Coloma. Las reses de Martínez Conradi salió desigual, pero tenía mucho que torear. Los picadores se emplearon a fondo y algún novillo, como el bravísimo segundo, recibió más castigo que algunas corridas completas de la recién finalizada feria malagueña.

El festejo comenzó con malas noticias. El prometedor novillero mexicano El Payo fue cogido en un quite en el que abrió plaza. No había intervenido el joven azteca en su turno y lo hizo Carmona por chicuelinas. Respondió El Payo por tafalleras y a la segunda resultó prendido. Tenía una cornada en la parte alta del muslo izquierdo. Sin ningún aspaviento, el chaval se marchó a la enfermería por su propio pie. Allí fue operado y pasó al hospital. Nueva cornada para el mexicano en su temporada española.

La novillada quedó en un mano a mano entre Carmona y Tendero, claramente ganado por el segundo, un novillero con cierto oficio y buenas maneras. Alejandro Carmona tiene importante deficiencias técnicas, por otra parte lógicas, pero también las tiene de ánimo, que en un novillero no tienen mucha explicación.

Alejandro Carmona se hizo cargo de la lidia del que hirió a El Payo. El novillo fue noble y soso. Carmona pudo torear en dos tandas con la derecha y una con la izquierda con cierta templanza. Los de pecho fueron buenos. El novillo pedía algo más de fibra por parte del novel almeriense.

El que mató en tercer lugar fue blando aunque llegó noblón a la muleta. Carmona no le cogió la distancia en varias tandas y se cansó pronto de estar en su cara. Eso siempre es malo en un novillero.

El quinto fue muy encastado y no permitía errores. Alejandro lo intentó sin éxito. El novillo pedía un sitio y esperarlo sin ninguna duda. Fue una pena porque ahí podía haber tenido su oportunidad.

El triunfador fue Miguel Tendero. Le cortó la oreja al sensacional novillo segundo. Se lució con el capote, en general toreando a la verónica con buen gusto y ganado terreno. Resultó atropellado al final de los lances, por fortuna sin consecuencias. Hubiera sido un drama que Carmona se hubiera quedado solo en la plaza con los seis de La Quinta.

La faena fue intensa porque Tendero maneja bien la mano izquierda y le pudo al astado. Bajó la mano y mandó en la embestida. De esta forma fueron surgiendo las tandas muy emotivas, las que un novillo bravo puede proporcionar. Se tiró a matar de verdad y la oreja fue de justicia.

El que mató en cuarto lugar, que hubiera correspondido a El Payo, fue muy blando y se movió poco. Aquí apenas pudo intentarlo y matarlo.

La tarde acabó a lo grande. Salió un excelente novillo, bravo de verdad y encastado, que pedía un torero y lo encontró. Se lució con el capote de nuevo. Miguel Tendero lo cosió a su muleta en una faena muy lograda con la base en la derecha. Le dio infinidad de pases con la virtud dicha: la dejó siempre colocada para ligarlos con valor e inteligencia. Faena de mando y poder por la derecha, aunque también tuvo alguna tanda de naturales de corte precioso. Se fue por la Puerta Grande con todo merecimiento, mientras el de La Quinta era ovacionado. Qué dos novillos echó este hierro en Almería.