La Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía ha emitido una nota en la noche del jueves, tras el comunicado de la empresa, en la que achaca la suspensión de las corridas de toros de Sevilla a la norma estatal que exige la separación de un metro y medio entre los espectadores, al tiempo que recuerda que el propio ministerio no le ha solucionado su petición para flexibilizar esa normativa. El comunicado es el siguiente:
Miembros del Gobierno andaluz y de la empresa Pagés, gestora de la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla, han mantenido una reunión hoy jueves para abordar la situación sanitaria que afecta a la celebración del ciclo continuado de corridas de toros que está programado a partir del domingo en el coso hispalense. Ambas partes se han comprometido a seguir dialogando y explorar las vías posibles que puedan redundar en favor de la Fiesta.
El Gobierno andaluz y la empresa gestora de la Real Maestranza han apurado las negociaciones para buscar una vía alternativa que flexibilice la Ley 2/2021 de Medidas Urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria que publicó el Gobierno central el pasado 30 de marzo en el Boletín Oficial del Estado. Dicha norma recoge en su artículo 14 que los espectáculos públicos tienen que asegurar una “distancia interpersonal mínima de 1,5 metros”, si bien añade que “cuando no sea posible mantener dicha distancia de seguridad, se observarán las medidas de higiene adecuadas para prevenir los riesgos de contagio”. El consejero de Salud, Jesús Aguirre, instó ayer a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, a que aclarara si existe alguna interpretación de la norma que permita flexibilizar el metro y medio de distancia para los espectáculos públicos. La ministra emplazó a la Comisión de Salud Pública de hoy. Y tras la comisión de Salud Pública, la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, remitió a “comisiones posteriores”. Ante la falta de respuesta concluyente por parte del Ministerio de Sanidad, el Gobierno andaluz sólo puede aplicar la norma estatal, que es de “obligado cumplimiento”, tal y como afirmó ayer mismo la ministra del ramo.
Dadas estas circunstancias, la delegación del Gobierno andaluz en Sevilla se ve en la obligación de aplicar la normativa estatal que incluye un metro y medio de separación entre los espectadores como condición para la celebración de la feria, salvo que se produzca un cambio sanitario o normativo. Asimismo, en este momento Sevilla se ve afectada por la reevaluación de riesgo sanitario, puesto que la provincia pasa a Nivel 3 grado 1. El plan de contingencia presentado por la empresa de la plaza de toros de Sevilla incluye medidas sanitarias adicionales como la realización de pruebas de antígenos pero no la separación del metro y medio de distancia entre los espectadores.