El juez que dirime el pleito que la empresa Pagés, concesionaria de la Plaza de Toros de Sevilla, puso en 2019 a la Real Maestranza de Caballería, ha dado la razón a la propietaria del coso, según informa el diario ABC.

El empresario Ramón Valencia, gestor del coso, acudió a los tribunales hace dos años para reclamar más de seis millones de euros en concepto del IVA del canon que paga a la Maestranza, una antigua disputa entre Valencia y la institución propietaria por los términos en los que está redactado el canon que tiene que abonar la empresa a la Maestranza por la celebración de los festejos taurinos.

El denunciante asegura que el contrato que está vigente es exactamente el mismo que firmó en 1932 Eduardo Pagés, en el que se estipula que la empresa está obligada a pagar cada año un porcentaje de todos los ingresos obtenidos incluyendo los impuestos, por lo que la empresa Pagés entiende que la normativa fiscal de hace 90 años era muy distinta a la actual.

En su opinión, el canon por el ‘alquiler’ de la plaza tendría que referirse sólo a la base imponible excluyendo el IVA, por lo que reclama seis millones que considera que no tendría que haber pagado. Por otra parte, el empresario defiende que también tendría que percibir un porcentaje de la recaudación de las visitas turísticas a la plaza, que se tramitan a través del museo, gestionado directamente la Real Maestranza.