Por José Luis López Marín


José Luis LópezQueridos amigos, han pasado poco más de dos meses, desde que los toreros del G-5, emitiesen aquel inoportuno comunicado con el que lanzaban un órdago a lo grande a la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, anunciando que no volverían a torear en la plaza del Baratillo, hasta que la Empresa Pagés dejara de regentar el coso. Todos pensábamos entonces, que esta decisión de los “coletas” iba a tener un final negociado, y que las aguas volverían al cauce de la normalidad, mas después del comunicado de Eduardo Canorea, en el que se disculpaba con José Tomas y pedía árnica en cuanto a los demás toreros. Pero “nuestro gozo en un pozo” llegaron los comunicados beligerantes de Perera y El Juli, el conciliador, pero solidario con sus compañeros, de Manzanares, quien se vio apoyado en twitter por Talavante, los silencios de Morante… y todo se fue al garete.
El plan B de la empresa se puso en marcha, y fueron pasando los días y las semanas, comenzaron los rumores sobre toreros, corridas, fechas, combinaciones, alternativas y especulaciones de los aficionados. Vamos llegando a las fechas de presentación de los carteles y nadie de la gerencia empresarial abre la boca. Los compañeros de la prensa tratan de contactar con toreros, apoderados y ganaderos para formar el puzzle de un cartel que acoplar al dia este o aquel, y la empresa trabajando en silencio, remitiendo a todo el mundo que recaba información, al dia de la presentación oficial de los carteles, como ha sido todo los años.
Claro, la diferencia es que este año no es igual que los anteriores, que este año las llamadas primeras figuras del escalafón no van a estar en las combinaciones de la Feria de Abril de Sevilla, que la gente llana de la calle, la que va a comprar las entradas y los abonos de las corridas, la que van a dictaminar al final de la feria, si la empresa ha acertado o no, está habida de conocer, no el resultado final de la cartelería (ese lo sabrá en su tiempo), sino el proceso de confección de unos carteles atípicos para la Feria mas taurina del mundo, y es justo que la empresa se mostrara algo mas abierta con estas personas a la hora de facilitar la información que se pueda ofrecer, sobre lo que se esta cociendo en la calle Adriano.
Hace unos días me maravillaba de la naturalidad con que el empresario de la plaza de Madrid hablaba de los carteles de San Isidro 2014, en directo, con un compañero de la información taurina de la SER. El gerente daba pelos y señales de algunas combinaciones que ya estaban programadas, de fechas en las que se lidiarían algunas ganaderías, de toreros que harán el paseíllo en Las Ventas en tres ocasiones o de quien lo hará una sola vez. Habló de las condiciones en que saldría el abono o del cartel de la Beneficencia. Y todo esto sin que se derrumbaran los cimientos de la tauromaquia.
Como la mujer del Cesar, no solo tiene que ser honrada, sino también parecerlo. No solo hace falta hacer los mejores carteles, con los mejores toreros disponibles, y trabajar para que estos sean los más originales y variados, también hay que saber hacerle llegar a los aficionados el trabajo que hay que desarrollar y las dificultades que hay que vencer para conseguir contentar a todos: toreros, ganaderos, aficionados y empresa.
Por ello a los señores Canorea y Valencia, con todo el respeto que me inspiran, me permitiría sugerirles, que no deben de olvidar que este año va a ser una temporada en el coso del paseo de Colon, muy diferente a las que se vienen dando, desde hace muchos años, en la capital hispalense, y que por lo tanto la forma de actuar de la empresa, también debe de ser diferente.
La Feria del 2014 hay que venderla de una forma distinta, no va a ser una feria que se venda sola. Aquello de que “El buen paño, en el arca se vende” ya ha pasado a la historia y las corridas de toros, como la mayoría de los espectáculos, hay que promocionarlos y publicitarlos, sobre todo cuando su organización esta llena de adversidades artísticas y económicas.
Recién iniciadas las hostilidades entre el G-5 y la empresa de Sevilla, un servidor escribía un artículo que titulaba ¿Pulso a la Real Maestranza? En el que decía, entre otras cosas, lo siguiente:
“Hay también quien piensa, que la falta de estas figuras en los carteles abrileños de la Feria, aun notándose, daría pie a una nueva forma de ver toros en Sevilla, acartelando a toreros no tan acomodados como estas grandes estrellas, junto a ganaderías que son las que habitualmente exigen los primeros espadas del escalafón. Con este planteamiento y menos oscurantismo en los entresijos generales de la feria y festejos, al bajar los costos de contratación de toros y toreros, mas algo que también baje la Maestranza, como dueña del coso, unido a que los beneficios empresariales se ajusten a la realidad actual, las entradas bajarían de precio y haría mas factible cubrir de aficionados y gente joven los tendidos de la plaza mas hermosa del mundo…”
Si esto se pudiera conseguir, continuaba en mi escrito:
“…entonces, si aplaudiría la decisión de los toreros, de no acudir a la Maestranza, pues habría sido la piedra de toque para cambiar muchas cosas, que beneficiarían al mundo de los toros en general y no solo a unos cuantos en particular”.
Señores, esta temporada en Sevilla, no va a ser una temporada habitual, aprovechémosla buscando las cosas positivas que tiene, y tratémosla también de una forma diferente. Pongamos todos de nuestra parte en la medida que a cada uno le corresponda y después a esperara que un toro o mas de uno, meta la cara en la muleta de algunos de los toreros que vengan al abono sevillano,…si lo aprovechan, la Feria estará salvada.
Que Dios reparta suerte, amigos.

A %d blogueros les gusta esto: