Carlos Crivell.– El días más esperado del año en la Sevilla taurina es el Domingo de Resurrección. Es el Domingo de Romero. Curro fue quien le dio vitola a la fecha. Curro no tiene sucesor en el corazón de los sevillanos. Solo Morante tenía esa posibilidad. Pero Morante abandonó a Sevilla en 2014 y 2015 y no pisó la plaza. Ahora, nuevamente, se aleja de esta emblemática fecha. Es el segundo año que no acude a Resurrección. El pasado año fue por lo de la televisión. Solo toreó en San Miguel. Este año tampoco aparece en la corrida de la inauguración. Se dijo que era de nuevo por las cámaras, aunque finalmente se dejará televisar hasta tres tardes en la Feria. Es posible que ni a Morante ni a la empresa le interesara la presencia del torero en esta fecha.

Fuera el de La Puebla, el cartel estaba hecho. El Juli, triunfador de 2018; Manzanares, eterno y adorado en Sevilla, y el fenómeno necesario en todas plazas, Roca Rey. Es un cartel de tronío que pondrá el no hay billetes. Un cartel rematado en una fecha en la que hay ansiedad en los aficionados por volver a la Real Maestranza.

Para El Juli será la octava tarde en el Domingo de Pascua. Salió por la Puerta del Príncipe en la primera en 2001. Repitió la salida triunfal en el año 2013, el mismo en el que después resultaría cogido de gravedad en Sevilla. En 2019 fue el triunfador absoluto de la feria sevillana con el histórico indulto del toro Orgullito de Garcigrande.

José María Manzanares cumplirá su décimo Domingo de Resurrección. Es un clásico en el Domingo de Pascua. Como detalle curioso, nunca ha logrado salir por la Puerta del Príncipe en esta fecha. Por su parte, Roca Rey, torero aún de escaso recorrido, cumplirá su tercer paseíllo en Resurrección. Toreó en 2017 y 2018 y repite en la de este año. El peruano busca su primera Puerta del Príncipe en Sevilla.

Además de Resurrección, la temporada contempla una corrida de toros antes del ciclo continuado, que se celebrará el día 28, con las elecciones generales como telón de fondo. La buena corrida de La Palmosilla de 2018 no ha podido dar el salto a una mejor fecha. Bolívar, Luis David y Rafael Serna componen un cartel internacional algo extraño.

A partir del 1 de mayo y hasta el domingo 12 habrá corridas de toros, la día 5 de mayo de rejones y la del día 8 una mixta que la empresa ha accedido a organizar aunque siempre se había mostrado en contra de este tipo de festejos. En la primera de rejones dominan los Hermoso, padre e hijo, con el aditivo de Lea Vicens, mientras que la mixta es a mayor gloria de Diego Ventura, que de esta forma vuelve a Sevilla tras su excursión a Espartinas del pasado año.

La ciclo está dominado por los matadores que han sido contratados para cuatro tardes en el abono, aunque una de ellas será en la Feria de San Miguel: Morante, El Juli, Manzanares y Roca Rey. De hecho, en la Feria solo Morante está anunciado en tres tardes, lo que le convierte en el motor de este ciclo. El de La Puebla se arropa cada tarde con una de las figuras. Torea la primera con El Juli, la segunda con Manzanares y la tercera con Roca Rey. Perera, Urdiales y Pablo Aguado completan las ternas.

Hay cuatro toreros que harán dos paseíllos en la Feria: Miguel Ángel Perera, Antonio Ferrera, Pepe Moral y Sebastián Castella. El torero francés protagoniza una de las noticias de este ciclo al anunciarse en la de Miura.

Con un festejo, además de los citados toreros del día 28 de abril, aparecen José Garrido, Joaquín Galdós, Alfonso Cadaval, Manuel Escribano, Emilio de Justo, Diego Urdiales, Álvaro Lorenzo, Ginés Marín, Cayetano, El Cid, Paco Ureña, Pablo Aguado, El Fandi, López Simón y Octavio Chacón. En total, en la Feria sevillana estarán presentes 23 matadores de toros y cuatro rejoneadores.

Enrique Ponce se quedó fuera de los carteles por falta de acuerdo con la empresa.  La situación actual del torero valenciano no le hubiera permitido torear en Sevilla. Se ha comentado la ausencia de algunos toreros sevillanos, aunque ciertamente estos no pasan por su mejor momento. De todas formas se esperaba la presencia de Juan Ortega, Javier Jiménez o Antonio Nazaré. Se despedirá de la Feria El Cid, que volverá en San Miguel; parece poco una corrida para Pablo Aguado y tiene su recompensa Pepe Moral. Otros matadores que no han nacido en Sevilla podrían haber tenido su oportunidad en la Maestranza. Sin embargo, además de las figuras deseadas por los aficionados, hay buenas oportunidades para toreros que están creciendo.

Con relación al ganado no hay ninguna novedad llamativa. Se lidia una corrida de Santiago Domecq que ocupa el sitio que tuvo hace un año Las Ramblas. La de Matilla desaparece y duplica Garcigrande. Daniel Ruiz vuelve, aunque deberá esperar a septiembre. Al final, lo más granado de las ganaderías de lujo que gustan a las figuras.

La empresa declaró que era una feria para aumentar el abono. La noticia es que el número de abonados ha sido prácticamente el mismo que el de 2018. Cuatro abonos más que entonces. Es decir, algo más de 2.300 abonados. La Feria, a tenor de los carteles y de la demanda de entradas, será triunfal en las taquillas porque se presumen cinco o seis ‘no hay billetes’. En contra, algunas corridas no pasarán de media plaza. En San Miguel se pueden poner el cartel de completo las dos tardes. No son malas previsiones para la empresa. Es una feria de figuras y de oportunidades. Lo que Sevilla siempre ha demandado.