Jesús Millán y Juan José Padilla recogieron ayer los trofeos doctor Vila Arenas, que lograron uno por su quite por chicuelinas y otro por su quite por valentía. El acto fue nuevamente uno de los pórticos que le indica a la ciudad que los días de toros están detrás de la esquina.

El cirujano jefe de la enfermería de la Maestranza, Ramón vila, fue el anfitrión de las autoridades, como José Antonio Soriano, Director General de Espectáculos Públicos; José del Valle, delegado de Gobernación en Sevilla y secretario de la Maestranza, Miguel Solís.

En su habitual disertación, Ramón Vila recordó a algunos personajes desaparecidos, como Rufino García y Filiberto Mira. Anunció la creación de dos premios nuevos, uno a la mejor crónica de la Feria y otro a la mejor fotografía editada.

Jesús Millán recogió el trofeo al quite artístico, realizado a un toro de Miura. Padilla lo hizo por uno al propio Millán cuando fue cogido a portagayola, aunque como se hizo especial hincapié que el premio era