Juan Manuel Pérez Alarcón.- La 5º de feria no podemos calificarla como mala, o como buena, sino más bien todo lo contrario. Una tarde donde el calor ha sido sofocante, y se ha lidiado un presentable y correcto encierro de Jandilla/Vegahermosa, variados de hechuras, y que ha tenido una característica principal en su juego, y es que les ha faltado chispa y motor en el último tercio, exceptuando algún toro (2º 4º y 5º) que han podido trasmitir algo más en los tendidos. Y todo esto con casi 3/4 de plaza rozando en los tendidos, lo que hace que digamos que fue una buena entrada.
Sebastián Castella con su primero estuvo muy técnico en toda la lidia y queriendo hacer las cosas muy despacio. En la capa se dejó poco y solamente en un quite de Escribano por chicuelinas y una media, se pudo ver algo de clase del toro. El toro no tenía clase pero el francés tampoco templó las sosas embestidas en una faena con muchos enganchones. Faena encimista cuando a lo mejor el toro pedía algo de distancia. Al final el público se aburrió.
Recibió discretamente con el capote al cuarto de la tarde. El toro metía bien la cara en los engaños y la suerte de varas paso desapercibida. En banderillas fue largo a los capotes en una lidia magistral de Javier Ambel y dos pares poderoso de José Chacón. En la muleta tuvo emoción las dos primeras series. La primera con un pase cambiado por la espalda para después ligar varios de pecho sin inmutarse. El toro careció de poca fuerza pero trasmitía algo cuando el torero le dio distancia. Se empeñó Castella en darle poco sitio y el toro se fue apagando. Me hubiera gustado verlo en otras manos. Silenciada su apelmazada actuación.
Manuel Escribano recibió a su primer oponente de rodillas con una larga limpia y cuatro verónicas y una media que tuvieron ritmo y cadencia. El toro pedía hacerle las cosas bien, y Escribano lo cuido en el caballo. En banderillas pudo emoción especialmente en el tercer par por los adentros y pegado a tablas que tuvo mucho emotividad. En la muleta el toro demostró nobleza pero poco motor y el de Gerena planteó una faena templada, equilibrada y muy técnica. Se acopló tarde al toro pero cuando lo hizo le saco tres tandas de naturales lentos que tuvieron mucho eco en los tendidos. Lástima que el toro no tuviera más energía. Un trasteo final algo incierto le restó más acople a la faena. Tras una estocada algo tendida se le pidió con fuerza una oreja que el Usía no concedió. Una vuelta al ruedo fue el premio justo.
Con el quinto toreo pulcramente a la verónica con mucha cadencia y naturalidad. Lo mejor de la feria con el capote. Y mejor la media. Muy bien Escribano con el capote. Se volvió a picar lo justo ante un animal que tuvo algo de motor en banderillas. Mucha voluntad y acierto en banderillas por parte de Escribano, destacando un par al quiebro. Planteó pelea el matador recibiéndolo con la derecha. Faena fibrosa con toro noble y de calidad pero que le faltó trasmitir algo más. Pulcro el torero, puso equilibrio toreando al natural con trazos templados y largos. Se apagó pronto y todo quedo en una grato sabor de boca pero sin llegar al triunfo. Tras estocada trasera y caída se le despidió con palmas por su entonada actuación.
Iván Fandiño pudo brillar sólo en el saludo capotero en el tercero de la tarde. Fue picado con celo y buena ejecución por parte de Manuel J. Bernal. En la muleta el toro desarrolló genio y fue incómodo para el torero que apenas pudo lucirse. Además alguna colada incómodo la lidia. Tras una estocada se silenció su labor.
En el último su labor también estuvo marcada por la disposición y por el buen manejo del capote, con verónicas muy templadas. pero poco a poco el toro se fue apagando y la faena perdió intensidad. Mucha disposición pero poco chispa en el ganado, pero debo decir como en el prólogo, que no fue una mala tarde, pero sí los toros de Jandilla hubieran tenido fondo y algo más de chispa, la cosa hubiera cambiado. Otra vez será.