El matador de toros sevillano Salvador Cortés ha firmado contrato de apoderamiento con el taurino murciano Pedro Rosell Ruiz, en un compromiso de un año de duración y que incluye una exclusiva de 25 corridas que el apoderado se compromete a firmarle al torero. En el equipo de trabajo seguirá Melquiades Garrido, que hasta ahora se ha ocupado de los asuntos del espada. También se incorpora Alejandro Enríquez.

Pedro Rosell es un empresario que organiza festejos taurinos en plazas como La Hoya, Écija, Vélez Rubio, que en la actualidad dirige la carrera de Alfonso Romero. Según manifestó, “Salvador Cortés me parece un buen torero, que tiene ahora un momento espléndido de madurez y que, si se cuida de forma conveniente, tiene muchas cosas que decir en la Fiesta”.

El contrato de apoderamiento fija las 25 corridas como el mínimo que Rosell asegura a las empresas, “aunque todo lo que se pueda superar será bienvenido, será señal de que las buenas actuaciones de Salvador le proporcionan muchas actuaciones”. Se ha firmado un año, pero “si estamos contentos al final de 2010 se prorrogará para el futuro”.

Rosell afirmó que “el núcleo fundamental de la temporada serán Sevilla y Madrid. En Sevilla, aspiro a dos corridas en el abono que mejoren la contratación del año pasado”. Como se recordará. Salvador Cortés toreó en Sevilla tres corridas de toros. Se anunció en dos en el abono, una en preferia y la del Corpus, y cerró el año en la Maestranza en la del 12 de octubre. Cortó trofeos en la preferia y en la del Corpus, una corrida en la que actuó recién salido de una cornada en Madrid y cuando no estaba aún recuperado. Para acudir a Sevilla, “antes actuará en algunas corridas que aún no tienen fecha, pero una será en Fitero”.

Por su parte, Salvador Cortés mostró “mucha esperanza en esta etapa que ahora comienza”. El año pasado actuó veinte tardes, “con lo que es seguro que este año superaré esta cifra”. Cortés lamentó que “hay muchas empresas que no contaron conmigo después de haber triunfado”.

Salvador Cortés vivió su etapa más brillante cuando era apoderado por la empresa Taurotoro, de González de Caldas. El año pasado fue dirigido por Hipólito y Melquiades, aunque a mitad de temporada el primero se desvinculó del equipo. En la Maestranza ha cortado orejas todos los años desde que tomó la alternativa en la Feria de 2005.

 

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