La plaza se llenó hasta la bandera con la esperanza de ver una buena corrida, sobre todo por la presencia de Talavante y Manzanares. Al final, otra decepción.

Valiente la presidenta. Es muy arriesgado devolver a los corrales los dos primeros toros de un festejo. La presidenta Ana Isabel Moreno lo hizo en decisiones acertadas. En esos momentos, el problema era grande porque, en teoría, sólo se dispone de dos sobreros. Seguro que había más toros, pero la presidenta estuvo ayer muy bien. Sólo la pierde su facilidad para dar orejas. Lo de la petición mayoritaria está bien, pero la autoridad debe velar por el prestigio de la plaza.

La cuadrilla de Manzanares. Nuevamente brilló la cuadrilla de Manzanarse al completo. No hubos saludos, pero Juan José Trujillo y Curro Javier anduvieron en tono alto, lo mismo que los picadores Barroso, que sustituyó a Chocolate en el quinto al resultar lesionado el caballo. Bien con los palos Valentín Luján.

El Fandi, director de lidia. El torero de Granada estuvo hecho un gran torero en su faceta de director de lidia. Siempre bien colocado, se preocupó de todos los compañeros y realizó varios quites muy oportunos.

Derribos y caballo herido. A pesar de la flojedad de la corrida, varios toros derribaron. El quinto hirió al equino en el cuello y se marchó al patio de caballos.

Palos a los caballos. Algunos aficionados protestan por los palos que los monosabios le dan a los caballos de picar, algo que debería prohibirse.

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