La plaza registró la entrada una entrada floja para un viernes de farolillos. La tarde estuvo entoldada y apareció la lluvia en el toro sexto, lo que se notó con una desbandada de quienes no llevaban útiles para cubrirse de la lluvia.
LA BANDA, EN SU SITIO. La banda de Tejera había tenido tardes malas, algunas muy desafortunadas. En la tarde de ayer se llevó una ovación porque volvió a ser una banda con sensibilidad. El quinto cogió a David Mora ya al final y lo desarmó. La música dejó de tocar, pero en cuando el torero se repuso volvió a tocar con presteza. Ovación y ése es el camino. Tristán se sacó la espina.
VARETAZO. El diestro David Mora sufrió sólo un varetazo. Pasó por su pie a la enfermería y salió al poco. El pronóstico es leve.
CUADRILLAS. No hubo saludos en banderillas, pero sí buenos pares de banderillas. Destacaron Félix Rodríguez y El Puchi. A caballo, aplausos para Benito Quinta, derribado en su puesto de reserva en el sexto.
LUCES Y CLARINEROS. Las luces se encendieron a la salida del cuarto, antes de lo habitual. En el primero, los clarineros se despistaron y no atendieron el cambio de tercio ordenado por el presidente, que se vio obligado a sacar el pañuelo blanco en dos ocasiones.
MONOSABIOS EN APUROS. El sexto derribó en terrenos de sol y en su huída estuvo a punto de alcanzar a un monosabio, que se vio obligado a saltar al callejón. El hombre lo logró a duras penas.
Nacido en Sevilla en el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, frente a la Maestranza. Aficionado a los toros desde su infancia gracias al ejemplo paterno, un viejo amante de la fiesta que vio torear a Guerrita. Abonado de la Real Maestranza desde pequeño. 