Ortega Cano estuvo ayer en el quirófano seis horas y media donde le han reconstruido los fuertes daños que sufría en el tobillo izquierdo que quedó muy dañado tras el accidente. Después de 17 días, los médicos todavía no habían podido intervenirle debido al grave estado del diestro y a la fiebre que sufría.
"Los médicos han reconstruido esa zona y han salido muy contentos porque ha mejorado muchísimo el tobillo", asegura Paco Ortega, sobrino del torero. Además, han aprovechado esta operación para "quitarle un clavo que le habían colocado entre la rodilla y el fémur en una primera intervención", asegura Paco Ortega, quien espera que con esta intervención, "pueda remitir del todo la fiebre porque puede que la fiebre tan alta que tenía tuviese su origen en el tobillo".
Paco Ortega ha afirmado que en unos días, "quizá mañana", los médicos tengan que practicarle una traqueotomía porque ya son muchos los días que está entubado.