Alvaro Justo: «Lo mejor del año ha sido la puerta grande de Madrid»

¿Cómo ha sido su temporada?

Ha sido muy buena, sobre todo por el triunfo de Madrid. La verdad es que había comenzado ya bastante bien con el triunfo en las novilladas de Vista Alegre. Pero sobre todo me quedo con la Puerta Grande de Madrid en la Feria de Otoño. Ha habido también tardes bonitas, como la de Galapagar, la de Arganda, Arnedo, donde no acerté con la espada. En fin, que ha sido muy bonito el final.

¿Cuál ha sido la mejor tarde de Alvaro Justo?

Sin duda, la tarde más significativa fue la del triunfo en otoño en Madrid. Esa salida por la Puerta Grande es inolvidable. Pero no puedo olvidar otras, como una de Nimes con un novillo muy complicado que me dio mucha moral.

¿Qué borraría de este año?

Nada… ¿Para qué borrar algo?

¿Cómo está el mundo de los novilleros?

La única forma de abrirse camino es teniendo ambiente, y eso se consigue con los triunfos. En mi caso, puedo hablar de que me he ido abriendo puertas con los triunfos. El arranque es complicado. Hay que tener al lado un hombre que mueva las cosas bien. Comprendo que para muchos compañeros es difícil abrirse camino tal y cómo están las cosas.

¿Cuáles son sus planes para el 2005?

Me gustaría comenzar en las primeras feria, como Valencia, Madrid, volver a Sevilla, y luego intentar tomar la alternativa por agosto, si es que las cosas ruedan bien.

Lo mejor del año

La Puerta Grande de Madrid. Creo que no hay ninguna duda a la hora de elegir. Es lo más bonito que me ha pasado hasta ahora.

Lo peor del año

La desgraciada tarde de mi presentación en Sevilla con una novillada muy floja y el público muy enfadado. Fue una pena, con un marco tan maravilloso, pero todo se vino abajo por la invalidez del ganado. Quise justificarme, me llevé mi segundo novillo al centro, pero el público estaba en contra. Un compañero de cartel se quedó incluso sin torear un novillo porque ya no había más. Una lástima.